Los últimos días de Septiembre fueron magníficos. El calor nos invita a tumbarnos en el césped bajo la gran magnolia, un árbol mágico que vive muy cerca del estanque, es allí donde juegan alocadas las libélulas sin darse cuenta del peligro que las acecha…
Cuando llegué la vi con actitud vigilante. Pensé: “ya cazó algo”. No puede reprimir sus instintos, siempre sucede, al final ella es la culpable de estas fotos.
¡Esta viva! sobre mi mano parecía tranquila intentaba mover sus alas pero... Algo falla no puede volar, esta herida.
Puedo observarla con detalle, aparentemente esta bien solo un pequeño daño en las alas.
7 comentarios:
Que chulada de fotos, Cris!!!! y de sitio, está todo colorido, y las hortensias da gusto verlas (es que Galicia es tierra de Hortensias con su humedad y clima propicio).
Una libélula muy bien capturada (con la cámara me refiero). Besos
Grazas, o artesán de Marín, foi o que me fixo a zanfona. Lévome moi ben con el, e cada vez que se me escachufa a zanfona, teño que ir a ta marin. Pero encántame o seu taller jeje. E a quen non.
Si, en dous anos xa medrei, xa cambiei. (SON DOUS ANOS.
Bueno, enton gracias polo da zanfonas.
Bicos e apertas.
muy buenas capturas de una libélula complicada de pillar. Al menos por aquí abajo en el sur. Un abrazo
Mui boas fotos !.
Excelentes fotos.
Um abraço e uma boa semana
Que preciosidad! Pedazo de helicóptero!
Estarei atento a segunda parte. A ver con que nos sorprendes...
Que fotazas!!!!!!!!!!! tremendas, y una historia tierna.... tengo ganas de saber qué pasó con tu libélula!! Un gran beso :)
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